Crecí en un entorno rural que inculcó en mí un profundo aprecio por la naturaleza, el mar, el trabajo duro y la sencillez de la vida.
A medida que pasaban los años descubrí una pasión ardiente por materializar eventos y celebraciones que impactaran la vida de las personas.
Esta pasión no solo era una forma de expresión artística, sino también una manera de hacer felices a los demás creando recuerdos inolvidables.
A pesar del entorno natural, he intentado combinar los valores tradicionales con una visión moderna y creativa, de ahí nació Casa Querida.
La conexión con la naturaleza influye en un enfoque sostenible.
Colaboramos con proveedores locales y respetuosos con el medio ambiente en nuestras decoraciones, procurando minimizar el impacto ambiental en cada evento.